¿Cuándo acudir a un psicólogo?

No existe un momento determinado en nuestra vida para acudir al psicólogo, ya que, ante las mismas situaciones, cada uno de nosotros reaccionamos de forma distinta.

En gran medida, la decisión de acudir al psicólogo depende de cómo nos sintamos ante diversas situaciones, si nos desbordan o nos provocan un intenso y duradero malestar emocional.

 

De la misma manera que buscamos a un profesional médico cuando sentimos malestar físico, será adecuado recurrir a un profesional de la psicología cuando no consigamos manejar nuestro malestar emocional y sintamos que las circunstancias nos sobrepasan.

 

El trabajo del psicólogo será el de acompañarnos y guiarnos en el proceso de encontrar alivio y equilibrio, ayudándonos a entrenar estrategias que nos permitan valorar y enfrentar las cosas de una forma diferente, con el objetivo de mejorar nuestras emociones y nuestra calidad de vida.

 

A continuación, recogemos algunas de las señales de alarma indicativas de que deberíamos buscar la ayuda de un psicólogo.

 

  • Sentirse desbordado por la vida cotidiana de forma frecuente, afectando esta sensación de forma negativa a nuestro desempeño laboral, personal, familiar, educativo, etc.
  • Problemas para conciliar el sueño y/o descansar mal, así como estar constantemente agotado.
  • Cambios importantes en el apetito y/o el peso, como consecuencia un malaestar emocional.
  • Dificultades sexuales, inapetencia sexual y/o alteraciones significativas de la líbido.
  • Temores intensos que nos llevan a evitar ciertas situaciones, interfiriendo con la actividad cotidiana.
  • La creencia de que uno está enfermo o miedo a padecer enfermedades graves, a pesar de que la opinión médica sea contraria a dicha creencia. 
  • Síntomas físicos recurrentes e intensos tales como palpitaciones, sudoraciones, sensación de falta de aliento, dolores de cabeza, etc., acompañados de malestar emocional. Del mismo modo, se debe buscar ayuda si se padecen ataques de pánico.
  • Tienes pensamientos repetitivos y negativos, sobre ti mismo o sobre el mundo que te rodea. Estos pensamientos e ideas son dolorosos, catastrofistas, pesimistas y/o desesperados.
  • Si sientes que nada tiene solución, que no hay salida y es imposible que las cosas mejoren.
  • Sentir una tristeza profunda y constante, que se está solo y que nadie te comprende.
  • No tienes ganas de hacer nada, apenas sales de casa y ya no disfrutas de aquello que antes te gustaba.
  • Sentimientos constantes de inferioridad, de ser inadecuado, haciendo que te sientas incómodo al relacionarte con los demás e, incluso, evitar este tipo de situaciones.
  • Sentir que tus emociones te desbordan (ira, tristeza, rabia...) y que pierdes el control de ti mismo.
  • Si te sientes agresivo y constantemente enfadado, discutes con todo el mundo y te parece que los demás están en tu contra o te atacan.
  • Cuando se han dado cambios importantes en la situación vital (rupturas, defunciones, marcha de los hijos, pérdida de trabajo...) que generan un intenso y persistente malestar.
  • Si piensas con frecuencia en hacerte daño, que no aportas nada al mundo o que los demás estarían mejor sin ti.
  • Si estás desconectado de ti y de los que te rodean, no sintiendo plenamente tus emociones y/o las señales de tu cuerpo.

¿Qué encontrarás en la consulta?

Un espacio sólo para ti

 

Las sesiones son un tiempo reservado únicamente para ti, donde puedes desahogarte y expresar tus sentimientos y pensamientos libremente.

Durante ese tiempo, tus necesidades son lo más importante y obtienes el apoyo incondicional del psicólogo, cuya prioridad es tu bienestar.

 

Sentirte escuchado, no juzgado

 

El psicólogo te escucha de forma objetiva, sin emitir juicios sobre lo que dices o cómo te comportas. Por el contrario, el objetivo será comprenderte, ver el mundo desde tu punto de vista, para después poder ayudarte mostrándote otras perspectivas.

 

Un reflejo de ti mismo

 

Cuando nos sentimos tristes o tenemos miedo solemos intentar evitar pensar en ello o expresarlo. 

Durante las sesiones, el psicólogo te servirá de apoyo para verbalizar y exponerte a aquello que temes y/o te preocupa, para comprenderte a ti mismo, para que aceptes determinadas situaciones o sentimientos... El terapeuta actúa de espejo, transmitiéndote lo que percibe a través de tus palabras, tus expresiones, tus conductas, etc., para que reflexiones sobre ello.

 

Objetividad y profesionalidad

 

Puesto que no es tu amigo, el psicólogo no emitirá opiniones ni juicios o consejos sobre tus problemas. Su trabajo será proponer hipótesis explicativas de lo que podría estar ocurriendo partiendo de las teorías psicológicas y un tratamiento personalizado según tus necesidades.

 

Estrategias de gestión de Emociones, Pensamientos y Conductas

 

En la consulta aprenderás a identificar los pensamientos que te producen malestar y a manjearlos adecuadamente, así como a gestionar tus emociones negativas. Además, se adquieren nuevas estrategias para afrontar  los problemas y alzanzar tus objetivos. 

 

Contacto

Centro Psicología Luis Ruiz
C/ Luis Ruiz 54 Bajo A
28017 Madrid

 

Correo electrónico: info@psicoluisruiz.com


Para más información o cita previa, puede llamarnos al teléfono :    640 654 593

Centro autorizado por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid con Nº de Registro CS 12503

Centro de Psicología Luis Ruiz
Versión para imprimir | Mapa del sitio
© Centro Psicología Luis Ruiz